La presidenta del Grupo BEI, Nadia Calviño, pronunció unas palabras en la reunión general anual de la Asociación Internacional de Mercados de Capitales (ICMA).
Buenas tardes. ¡Felicidades! Estaba precisamente felicitando al nuevo presidente. Es un gran placer volver a participar en la reunión anual de la ICMA. Ha pasado bastante tiempo desde la última vez que estuve con ustedes aquí. Es la primera vez que participo en calidad de presidenta del Grupo Banco Europeo de Inversiones.
De hecho, el Grupo BEI y la Asociación Internacional de Mercados de Capitales mantienen una fructífera relación de larga data.
Mencionaré algunos de los resultados de esa alianza en un momento, pero la verdad es que, durante más de cinco décadas, ustedes han desempeñado un papel fundamental a la hora de configurar el mercado mundial de capitales, actuando como referente normativo de confianza, así como promotor de transparencia y eficiencia en el mercado en todo el mundo.
Por lo tanto, felicidades por el nombramiento. Te deseo lo mejor en este nuevo cargo, que es trascendental para todos los que ocupamos un lugar importante en los mercados internacionales de capitales.
Y, por supuesto, estoy encantada y particularmente interesada en dirigirme a ustedes hoy, en estos precisos momentos, cuando el orden geopolítico y geoeconómico —que tan útil nos ha sido en los últimos ochenta años— está cambiando.
Deseo a anticiparles el mensaje clave de mi discurso: Elijan Europa.
No les sorprenderá. Es sencillo. Recuerden y compartan este mensaje cuando salgan. Porque, en realidad, en este período marcado por la intensa volatilidad del mercado —si bien es cierto que esta es probablemente la nueva normalidad— el activo que gana más valor es la confianza. Previsibilidad. El Estado de derecho.
Y Europa es un claro ejemplo de todo ello: un faro de estabilidad en tiempos convulsos. Y eso explica por qué los activos europeos, las acciones, los bonos y nuestra moneda común están superando las expectativas en estos últimos meses.
Europa puede aprovechar el momento a través de cuatro palancas clave: la integración de los mercados, la inversión a gran escala, la simplificación y las alianzas estratégicas.
Desde el Banco Europeo de Inversiones observamos un fuerte estímulo para seguir avanzando en estos ámbitos y tenemos el firme propósito de contribuir a lograrlo, aprovechando la posición única de la que goza el Grupo BEI en este momento.
- Una posición única como brazo financiero de la Unión Europea, con una oferta de instrumentos de inversión paneuropeos que canalizan el ahorro hacia la inversión en consonancia con las prioridades europeas comunes, pero también como el mayor banco multilateral de desarrollo del mundo.
- Una posición única gracias a un sólido balance de 600 000 millones de euros y a una capacidad de financiación AAA muy estable.
- Una posición única por su accionariado, los veintisiete Estados miembros, ni más ni menos, lo que en este momento es extremadamente relevante, ya que los veintisiete han respaldado de forma unánime nuestra Hoja de Ruta Estratégica, poniendo de manifiesto el alineamiento total de las prioridades de Europa.
- El Grupo BEI desempeña un papel clave en el mercado europeo de capital riesgo y venture debt.
- Y un papel innovador, puesto que es capaz de desarrollar nuevos productos y adaptarse a las nuevas prioridades estratégicas bajo la bandera europea.
Permítanme darles una instantánea de la situación actual:
1. Desde 2024, hemos ampliado nuestro marco de elegibilidad para intensificar el apoyo a las capacidades de seguridad y defensa de Europa. Gracias a nuestro enfoque proactivo, ya contamos con una cartera potente de más de 20 proyectos que se hallan actualmente en fase de evaluación.
Entre ellos, proyectos de infraestructuras militares y cuarteles, por ejemplo en Lituania, para acoger a las tropas del ejército alemán (Bundeswehr); pero también proyectos de espacio y ciberseguridad, drones, tecnologías innovadoras e incluso financiación para que los bancos proporcionen liquidez a las empresas de pequeña y mediana capitalización de la cadena de suministro de los contratistas europeos.
De hecho, estamos a punto de firmar el primer acuerdo con dos de los mayores bancos europeos para conceder financiación a las pymes europeas de la industria de seguridad y defensa.
Asimismo estamos trabajando con los principales bancos nacionales de fomento, incluido KfW —que, según tengo entendido, participó esta mañana— para reforzar nuestra cooperación en el desarrollo de proyectos europeos en ese sector.
2. Segundo ámbito de acción prioritaria: lanzaremos muy pronto la nueva plataforma «TechEU», que complementará el fondo para empresas emergentes y en expansión de la Comisión Europea, para ofrecer un abanico completo de instrumentos financieros —capital, cuasicapital, préstamos y garantías— y apoyar así proyectos de mayor riesgo y empresas innovadoras a lo largo de su trayectoria inversora, desde la idea hasta el mercado.
El objetivo es ofrecer financiación por valor de 70 000 millones de euros de aquí a 2027, empezando por las tecnologías limpias en las próximas semanas, para movilizar un mínimo de 250 000 millones de euros de inversión total, de modo que las ideas, las tecnologías y las empresas que nazcan en la UE puedan prosperar, crecer y quedarse en Europa.
TechEU también ayudará a atraer talento a Europa, creando un espacio seguro, una especie de santuario para la ciencia, la investigación académica y la ingeniería. Y estas palabras pueden sonar sorprendentes, pero creo que cuando leemos las noticias, nos damos cuenta de lo importante que es tener un entorno que realmente vele por estos objetivos y principios fundamentales.
3. En tercer lugar, me gustaría hablar de la innovación. Hemos puesto en marcha una garantía paneuropea de crédito a la exportación para las empresas de la UE que comercian con Ucrania.
Puedo compartir con ustedes que esta misma mañana hemos firmado el primer acuerdo, con la agencia danesa de crédito a la exportación, y esperamos firmar trece acuerdos más este año con agencias de crédito a la exportación de toda la UE para movilizar más de 300 millones de euros en apoyo de la economía de Ucrania y estrechar lazos con miras a la adhesión del país a la UE.
4. En cuarto lugar, estamos impulsando el mercado europeo de la titulización.
Y creo que gozamos de un amplio reconocimiento en este ámbito, también por nuestros productos innovadores.
Hace unos meses, firmamos la primera transacción de titulización sintética respaldada por préstamos para paneles solares. En colaboración con una fintech estonia, el acuerdo facilitará nuevos préstamos a particulares que deseen instalar paneles solares y bombas de calor en Polonia.
Y hemos firmado acuerdos similares de titulización sintética que apoyan la nueva financiación de inversiones verdes por parte de pequeñas y medianas empresas, por ejemplo, en Rumanía, o de pymes dirigidas por mujeres —de pymes de toda la UE en realidad.
5. El quinto y último aspecto que quería mencionar hoy es que estamos trabajando estrechamente con el Banco Central Europeo y con la Comisión Europea para reforzar el papel internacional del euro.
Debemos aprovechar la ventaja competitiva de Europa como potencia comercial y nuestro papel pionero en ámbitos como los bonos verdes y digitales.
De hecho, compartimos este papel pionero con la ICMA, la Asociación Internacional de Mercados de Capitales, porque ustedes nos acompañaron en 2007 cuando lanzamos los primeros bonos de sostenibilidad. Y también nos apoyaron y nos ayudaron a desarrollar los principios de los bonos verdes en 2014. Ustedes aportaron transparencia y normalización, lo que dio lugar a una clase de activos muy productiva.
Hoy, los mercados de bonos verdes, sociales y de sostenibilidad han alcanzado un volumen de emisión combinado cercano a los 5 billones de euros.
El euro y los emisores europeos lideran el mercado mundial.
Solo el BEI ha emitido más de 120 000 millones de euros en bonos verdes y sostenibles, y se encuentra entre las principales entidades en este ámbito.
Hace un par de meses, nos convertimos en el primer organismo supranacional que emitía un bono verde, obviamente en consonancia no solo con los Principios de los Bonos Verdes de ICMA, sino también con los requisitos de la normativa de la UE sobre los bonos verdes. Esta emisión de bonos verdes europeos, con un volumen de 3 000 millones de euros, es la mayor de la historia. La demanda superó con creces la oferta, en más de trece veces.
Creo que esto demuestra que en el mercado existe una fuerte demanda de productos de inversión responsables y sostenibles.
Y al mismo tiempo deja patente que, en un contexto en el que palabras como «clima» parecen revolucionarias, es importante que podamos demostrar que invertir en la transición verde no solo es lo correcto, es también lo más inteligente.
Además, es esencial seguir a la vanguardia con nuevos instrumentos, como los bonos digitales, en los que el Banco Europeo de Inversiones también es pionero.
Y permítanme decir solo unas palabras sobre Cyril Rousseau, que está aquí y que es el director general responsable del Departamento de Finanzas. Le apasiona la innovación. Estoy realmente impresionada, y quiero felicitarle por su dedicación y también por su dinamismo en estos nuevos ámbitos.
Permítanme concluir.
La inversión es una participación en el mundo del mañana.
Está en nuestras manos dar forma al mundo del mañana.
En un contexto en el que la idea de «todo a la vez en todas partes» está cambiando rápidamente, es el momento de elegir Europa.
Es hora de intensificar nuestras inversiones, ofrecer seguridad y claridad a los inversores privados, marcar la diferencia sobre el terreno, creando alianzas sólidas tanto dentro de la UE, incluido el sector privado, como en todo el mundo.
Estoy muy orgullosa de dirigir el Grupo Banco Europeo de Inversiones.
Estoy orgullosa de ser europea.
La unidad hace la fuerza.
Y estoy segura de que, estando unidos, lo lograremos.
Así que únanse a nosotros. Cuento con ustedes.
Muchas gracias.